Debut de éstos ingleses quienes tocan black metal con melodía y atmósfera y sus letras están dirigidas a la naturaleza, paisajes y entorno de éstos músicos.
Ellos son: Kai Beanland en guitarra y voz, Mateo Zabawa en guitarras, Nate Lewis en el bajo y Gary Stephenson en batería.
La música se sitúa a mediados de los noventas con bandas de black metal que empezaban a escoger otros caminos, ya no solo las clásicas letras anticristianas, y se enfocaron al paganismo, en ese enfoque la música también cambió, y de ser el black metal solo agresión y sonidos oscuros, pasaron a darle una atmósfera mas diversa. El siguiente paso fue hablar totalmente de la naturaleza y paisajes de su entorno, mitología e historias fantásticas dependiendo del lugar de procedencia de la banda.
En éste último grupo se acomoda Ante-Inferno, quienes tocan black metal tal cual se hacía en los noventas, misma producción, sonido y demás, así, canciones como "Oath" de mas de nueve minutos pintan paisajes de bosques y lugares recónditos que nuestra mente sólo a través de éstos sonidos imagina. Ellos desarrollan su fórmula en todas las canciones, con mucha inspiración, incluso en pistas veloces como "Passing" y "Return", que son mas extremas y agresivas, con voces mas desgarradas y blastbeats, sin embargo, se encargan de hacerlo sonar épico.
Las dos pistas finales son de las mejores del disco, con bastante atmósfera, velocidad y agresividad, "Worship" y "Fragments" tiene todo lo mejor de las anteriores canciones, que aunque no tienen mucha variedad, cada una te engancha y tiene cosas a rescatar. Sin alinearse musicalmente a lo actual, ésta banda demuestra que aún se puede explotar una de las tantas variantes del black metal de los noventas, y no esperes corpsepaint ni que escupan fuego en un bosque, la banda usa una imagen simple.
Mis favoritas: "Oath", "Worship"
Me gustó: 71%
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