The Hellacopters son: Nicke Andersson en guitarra y voz, Robert Eriksson en batería, Anders Lindström en teclados y Dregen en guitarra. El álbum fue producido por Nicke en Strawberry Studio & The Honk Palace. La portada del álbum fue hecha por Max Löffler.
Como gran fan de Kiss, y los setentas en general (basta escuchar su creatividad con su otra banda, Lucifer), Nicke entrega canciones en esa línea, con más apego al garage rock de la época, pero con muchos ganchos, siempre logrando canciones memorables.
La portada muestra como elemento principal un pedal de Overdrive (sí, con sus perillas, marcador analógico y todo) como si fuera un monolito caído del cielo y encendido por los rayos, al cual unas manos quieren tocar como si fuera algo sagrado. Aunque el concepto parezca tonto, el producto final es de alta calidad y no cae mal.
Musicalmente, y como ya adelanté, el disco está repleto de canciones memorables desde que inicia con "Token Apologies" (con influencia de Kiss), para luego entregar variedad de pistas cortas y efectivas como la hard rock "Don't let me bring you down", con un coro pegajoso y adictivo, igual sucede con la setentera "Wrong Face On", o "Soldier On" que es a medio tiempo con teclados sonando aquí y allá, y como siempre otro gran coro. Más variedad con la garage rock "Faraway Looks" o también la balada "The Stench". En el cierre con "Leave a Mark" la banda usa cinco minutos para hacerlo épico y potente.
"Overdriver" es otro buen disco de The Hellacopters, banda que no decepciona, y que sin duda es la abanderada del rock en la actualidad. Recomendado.
Mis favoritas: "Don't Let Me Bring You Down", "(I Don’t Wanna Be) Just A Memory", "Soldier On"
Me gustó: 88%
No hay comentarios:
Publicar un comentario